Estoy de acuerdo con la Fundación Mi Parque, en crear proyectos de espacios públicos para uso en emergencias. Y como no son eventos que uno anticipe, sería positivo que se concrete pronto la mejora de la calidad profesional del organismo ONEMI y que tenga la capacidad que esperamos de prever y resolver situaciones de emergencia como la que estamos viviendo. Por ejemplo, que se coordine la existencia y mantención de espacios seguros (se pueden incorporar dentro de Planos Reguladores en cada región dado que existen diferencias geográficas a lo largo del país) para reagrupar a las personas damnificadas, proporcionar alimentos, agua y abrigo, junto con elementos como las viviendas de emergencia que dio a conocer el arquitecto Federico Sánchez y concuerdo en que son óptimas en cuanto a su uso, acopio, transporte y reutilización.
El tema es que se destinen recursos importantes de una vez por todas, para enfrentar de buena manera problemas como este, además de incorporar en las decisiones urbanísticas a los Arquitectos del Paisaje cuyo aporte es significativo para evitar o mitigar las catástrofes en la población.
Por el momento, el MINVU ha dado a conocer que creará el Departamento Nacional de Reconstrucción, que nace a partir de la evaluación de especialistas a cargo de esta tarea. Esperaremos también que se ocupen de ser activos en las tareas de conservación del Patrimonio Arquitectónico en Chile y de tener un papel importante en la fiscalización de lo que se construye en el país.
